Lo que comemos y bebemos puede afectar la capacidad de nuestro cuerpo para combatir infecciones, así como la probabilidad de que desarrollemos problemas de salud en el futuro, como obesidad, enfermedades cardíacas, diabetes y diferentes tipos de cáncer.



Los ingredientes exactos de una dieta saludable dependerán de diferentes factores, como la edad y la actividad que tenemos, así como los tipos de alimentos disponibles en las comunidades donde vivimos. Pero en las diferentes culturas, hay algunos consejos alimenticios comunes para ayudarnos a llevar una vida más larga y saludable.

¿Cómo lograr una dieta saludable?



Come variedad de comida



  • Trata de comer diariamente una mezcla de alimentos básicos como trigo, maíz, arroz y papas, mucha fruta fresca y verduras, y alimentos de origen animal (como carne, pescado, huevos y leche).

  • Elije alimentos integrales como maíz, mijo, avena, trigo y arroz integral; son ricos en fibra valiosa y pueden ayudarte a sentir satisfecho por más tiempo.

  • Consume carnes magras.

  • Cocina al vapor o hervido en lugar de freír alimentos.

  • Para los bocadillos, opta por verduras crudas, nueces sin sal y frutas frescas.


Te puede interesar: EL EFECTO NEGATIVO DE UNA MALA ALIMENTACIÓN



Reduce el consumo de sal


Demasiada sal puede aumentar la presión arterial, que es un factor de riesgo importante para las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares.

  • Cuando cocines usa la sal con moderación y reduce el uso de salsas y condimentos salados (como la salsa de soja, el caldo o la salsa de pescado).

  • Evita los bocadillos con alto contenido de sal, y trate de elegir bocadillos frescos y saludables por sobre los alimentos procesados.

  • Retira la sal y los condimentos salados de la mesa e intenta evitar agregarlos por costumbre.

  • Revisa las etiquetas de los alimentos y busca productos con menos contenido de sodio.



Reduce el uso de ciertas grasas y aceites


Todos necesitamos algo de grasa en nuestra dieta, pero comer demasiada, especialmente los tipos equivocados, aumenta los riesgos de obesidad, enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.

  • Reemplaza la mantequilla y la manteca por aceites más saludables como la soja, la canola, el maíz y el girasol.

  • Elije carnes blancas como el pollo y el pescado, que generalmente son más bajas en grasas que las carnes rojas, y limite el consumo de carnes procesadas.

  • Revisa las etiquetas y siempre evita todos los alimentos procesados, rápidos y fritos que contienen grasas trans producidas industrialmente.


También puedes leer: 5 ALIMENTOS POCO SALUDABLES QUE DEBES EVITAR



Limita el consumo de azúcar


Demasiado azúcar no solo es malo para nuestros dientes, sino que aumenta el riesgo de aumento de peso poco saludable y la obesidad, lo que puede llevar a problemas de salud crónicos.

  • Limita el consumo de dulces y bebidas azucaradas, como bebidas gaseosas, zumos de frutas y jugos, concentrados líquidos y en polvo, agua aromatizada, bebidas energéticas y deportivas, té y café listos para tomar y bebidas lácteas aromatizadas.

  • Evita dar alimentos azucarados a los niños. La sal y los azúcares no deben agregarse a los alimentos complementarios que se administran a los niños menores de 2 años.



Limita la ingesta de alcohol


El alcohol no es parte de una dieta saludable. En general, beber demasiado, o con demasiada frecuencia, aumenta el riesgo inmediato de lesión, además de causar efectos a largo plazo como daño hepático, cáncer, enfermedad cardíaca y enfermedad mental.

La OMS aconseja que no hay un nivel seguro de consumo de alcohol; y para muchas personas, incluso los niveles bajos de consumo de alcohol pueden estar asociados con riesgos significativos para la salud.

 

Fuente: OPS